El Japón que no vemos - Tablas dinásticas
Francesco BaldessariTan pronto como se arraiga el culto a los antepasados, aparecen las tablas dinásticas. El privilegio poco envidiado de las casas nobles europeas: los registros de nacimiento detallados que se remontan a muchas generaciones son una característica habitual de la vida familiar en las culturas animistas.

Para venerar a tus antepasados, debes saber quiénes son. Las cosas se complican muy pronto, así que escribirlas es indispensable.
Pero aquí viene lo interesante. En las tablas dinásticas, nadie tiene igual. Debido a una combinación de afiliación sanguínea y edad, cada persona ocupa una posición única. En consecuencia, este tipo de sociedad presenta jerarquías sólidas, pero relaciones interpersonales débiles.
Desarrollan un lenguaje complejo para describir la relación entre individuos y aclararla cuando es necesario.
El énfasis en los linajes y líneas de sangre provoca la división de la sociedad en clanes.
Los clanes son grupos dentro de una sociedad que reclaman un ancestro común. Al estar basados en la sangre, son unidades herméticas. No se puede entrar ni salir. El clan es todo lo que conocerás.
Las sociedades basadas en la sangre son, en otras palabras, tribales. Tienden a ser inestables y sufren ciclos de guerra.
¿Te recuerdan estas descripciones a algo? ¿A algún país en particular? ¿A Japón? ¿A Escocia?
Francesco Baldessari















































